El Compliance o cumplimiento normativo, se refiere al conjunto de acciones, políticas y procedimientos que una empresa implementa para asegurarse de que sus operaciones se ajusten a las leyes y regulaciones aplicables.
En materia de Comercio Exterior, el Compliance abarca tanto las regulaciones locales como las internacionales, incluyendo aspectos aduaneros, fiscales, laborales, medioambientales y de seguridad, entre otros.
Para desarrollar un Sistema de Compliance en Comercio Exterior, puedes seguir los siguientes pasos:
- Evaluación de Riesgos: identifica los riesgos relacionados con las actividades de comercio exterior. Implica comprender las regulaciones aduaneras, arancelarias, sanitarias y cualquier otro aspecto relevante para la empresa.
- Políticas y Procedimientos: desarrolla políticas y procedimientos que guíen a todas las partes involucradas en las operaciones de comercio exterior.
- Capacitación y Concientización: una vez que tienes las políticas y procesos, capacita al personal sobre los mismos y desarrolla conciencia sobre la importancia del Compliance.
- Monitoreo y Auditoría: implementa un sistema de monitoreo y auditoría constante para asegurarte de que las operaciones se estén llevando a cabo de acuerdo con las políticas y las regulaciones aplicables.
Contar con un sistema de Compliance en Comercio Exterior ofrece numerosas ventajas tales como: mitigación de riesgos, mejora en la reputación de la empresa y eficiencia operativa.
Es por ello que en el episodio 278 de Negocios sin Complicaciones te comento sobre el programa piloto de Empresa Cumplida de Comercio Exterior, en el cual encontrarás los puntos que deberías tomar en cuenta para crear tu sistema de Compliance.
Y si requieres ayuda recuerda que contamos con el servicio de Consulta Online, así como el servicio de Desarrollo de Políticas y Procesos.